Mélissa y Gaëlle investigan el asesinato del director de una escuela de pole dance. Esta disciplina claramente no fue bien recibida por el vecindario, a juzgar por la petición de cierre del establecimiento y las numerosas amenazas que recibió la víctima. Sin embargo, nadie parece estar al tanto de su contratación en un club de striptease de lujo, propiedad de un delincuente bajo vigilancia de la brigada financiera. Con su formación como bailarina, Melissa es la única capaz de infiltrarse en el lugar. Y esta infiltración no es la única preocupación de Melissa. Ella tiene que dar una respuesta a la propuesta de matrimonio de Arnaud. Ella se ofrece a hacer lo imposible para conseguir su acuerdo, ¡y Arnaud está dispuesto a hacer cualquier cosa! En cuanto a Aurélien y Gaëlle, viven su relación en secreto durante toda la investigación, lo que divierte mucho a Gaëlle.